En mayo de 2017, el campo de paradas de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez, EMAVI, fue escenario de la ceremonia del sueño tangible que nació nueve años atrás, cuando se decidió fortalecer el área de intrucción en la Escuela. la solución más sencilla era importar aviones, pero la oportunidad histórica de innovación por parte de la Fuerza Aérea llevó a apostar por primera vez a la fabricación de una aeronave con industria aeronáutica nacional y así ponerse a la altura de Brasil y Chile.